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miércoles, 12 de agosto de 2015

Canciones de la Bodega, en Candás y Luanco



   Entre Candás y Luanco siempre existió una especial rivalidad o piquilla, ……..¡y que no falte!......., pero entre estas dos villas asturianas existen muchas cosas que las unen, con un mismo pasado pesquero, marinero y conservero, además de poseer el mismo encanto paisajístico, propio de nuestro litoral.



   Pipo Prendes compuso una hermosa canción que todavía permanece en los corazones de algunas mujeres que trabajaron en aquellas fábricas de conservas de Candás y Luanco, titulada “Canciones de Bodega”. 


      Esta es su letra:
   Contra viento y marea, tiempo de faenar, 
al alba a la bodega, en Luanco y en Candás.
   Las manos doloridas, el frío, la humedad, 
no evitan la alegría siempre se oye un cantar.
   Una vieja Habanera, suena al dulce compás ….. 
del coro de sirenas, mujeres de la Mar.
   Ellos a la costera, ellas sin descansar, 
de casa a la bodega, hay que ganarse el pan.
   Canciones de la Bodega, alma y suspiros de mar,
 las penas y alegrías de nuestra historia, Luanco y Candás.



   Por las que ya se fueron nuestro recuerdo va, 
en forma de habanera, mujeres de la Mar.
   Sois el salitre y viento de nuestra tradición,
 madres del mar, sirenas de nuestro corazón.
   Canciones de la Bodega, alma y suspiros de mar, 
las penas y alegrías de nuestra historia, Luanco y Candás.



   En estas villas de vinculación marinera existe todavía un sentimiento especial y cuando un grupo de voces canta una canción de Bodega, de alguna manera se intenta expresar un homenaje y se quiere recordar a aquellas mujeres que empeñaron su vida en las fábricas de conservas de Candás y Luanco, durante el siglo pasado.



   Es una forma de emplear la música para ensalzar la historia, la mar y las bodegas, las fábricas de pescado, …… nuestras raíces. 
   Hay muchas canciones que recuerdan tiempos pasados, en los que nuestra región estaba mucho más relacionada con el mundo de la mar. A principios del siglo XX, Candás contaba con 13 instalaciones dedicadas a la conserva, escabeche y salazón de pescados.


   Los tiempos cambian pero las canciones se “conservan”, como La Sardinera, otra preciosa melodía marinera que me emociona y me encanta. 
   Esta es su letra:
   Sardinera, Sirenita, llena de escamas y sal,
 vendiendo vas por caminos sardinitas de cristal. 
   Caracola submarina con los ecos de la mar, 
vas cantando por las calles ¡Quién me las quiere comprar!
   ¡Cuántas albas en los muelles!  … cuántas noches de portal, 
¡Cuántas esperas en balde! …. para un mendrugo de pan.



   Cantando por no llorar recorriste mil caminos,
 en la cabeza una “paxa”, en el corazón, los hijos.
   Encorvada por los años, blanca de tanto luchar,
 recuerdas cerca del fuego, caminos barcos y mar.
   No te aflijas sardinera, aunque no puedas andar,
 de la mar ya nadie trae SARDINITAS DE CRISTAL…..



   En esta ocasión todos queremos estar en el mismo “barco” de recuperar y mantener una tradición de muchos años. Para ello es necesario apoyar, desde todos los ámbitos, Certámenes y Encuentros dedicados a las “Canciones de la Bodega”, reconociendo, valorando el trabajo y la dedicación que ésto supone, y así poder recordar viejas canciones que forman parte del folclore popular…… y de nuestros corazones.



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